Las relaciones de pareja, el síndrome de Peter Pan y sus finanzas familiares

Hay muchas razones por las que nuestras finanzas pueden no ir tan bien, de hecho, en algunos de mis artículos he hablado de algunas de ellas, como una relación tóxica con el dinero, el no querer vivir de acuerdo con nuestras posibilidades, falta de un presupuesto, impulsividad en las compras etc.

En este artículo me quiero referir a una historia que muchos conocen como cuento infantil, película de Disney, pero no tanto como obra de teatro que es, originalmente, me refiero a la historia de Peter Pan o el niño que no quería crecer.

Del comportamiento del personaje principal de esta historia (Peter Pan), se deriva el nombre de un síndrome cuya principal característica es el no querer asumir responsabilidades, es un patrón de comportamiento y actitudes que dificultan el crecimiento y la madurez personal. Este es el síndrome de Peter Pan.

Implicaciones del Síndrome de Perter Pan en las relaciones de pareja

La persona prefiere mantenerse en un estado de adolescencia o juventud, lo que es nefasto para las relaciones de pareja y evidentemente para las finanzas de pareja o familia.

Las relaciones de pareja ya de por sí son complicadas, pero cuando alguno de los miembros de ella, tienen el síndrome de Peter Pan, la relación suele tornarse escabrosa, si se desea formar una familia y uno de los aspectos que más se afecta, entre otros, es el financiero.

Peter Pan odiaba a los adultos y no quería convertirse en uno de ellos. Deseaba seguir siendo un niño para siempre, por el miedo a afrontar problemas y responsabilidades. Del mismo modo, tampoco quería que las personas de su entorno, en el país de Nunca Jamás crecieran.

Peter Pan representa el deseo de no crecer por varias razones:

Quería libertad y ausencia de responsabilidades, sin reglas, como en el país de Nunca Jamás. Él puede hacer lo que quiera, cuando quiera, y no tiene que preocuparse por las obligaciones que vienen con el crecimiento y la madurez.

Él vive en un mundo de aventuras, juegos y sueños, donde la realidad cotidiana no tiene cabida y está libre de las preocupaciones y problemas que surgen con la adultez.

Peter Pan no envejece y se niega a enfrentar los cambios y desafíos que conlleva la vida adulta, evitando así los aspectos difíciles y a menudo dolorosos del crecimiento y el cambio.

De esta forma Peter Pan, se resiste a asumir tareas y roles propios de la edad adulta, como el cuidado de sí mismo, la independencia financiera o el establecimiento de relaciones serias y duraderas.

Si su pareja experimenta este síndrome, usted y su familia podrían experimentar un impacto negativo en sus finanzas familiares de varias maneras, por no mencionar otros aspectos.

La gratificación inmediata como un objetivo

En general las personas con este síndrome prefieren actividades que les brinden gratificación inmediata, es decir están más dispuestos al gasto, que al ahorro o la inversión. Normalmente privilegian la diversión y el entretenimiento, que los planes y obligaciones de corto plazo.  

Tienen miedo a comprometerse en proyectos a largo plazo. Prefieren mantener la libertad y evitar cualquier tipo de responsabilidad o compromiso duradero, por lo tanto, no son de fiar en cuanto a cumplir una serie de responsabilidades y desafíos de la vida adulta, como ajustarse a un presupuesto o pagar los gastos que le corresponde asumir en su hogar.

Dependencia económica

Aquellos que experimentan el síndrome de Peter Pan pueden depender económicamente de personas cercanas tales como padres, o cónyuges y suelen recargar las responsabilidades financieras en ellos, evitando así la responsabilidad de mantenerse por sí mismos o asumir un roll importante en la manutención del hogar.

Esto puede limitar su independencia financiera y dificulta su capacidad para tomar decisiones financieras importantes. Al eludir las responsabilidades financieras, esta persona no está facultada para llevar la economía familiar o participar en las decisiones importantes.

Se ve incapaz de asumir sus propias responsabilidades. Prefiere que lo hagan otros y descarga su responsabilidad en ellos. Por eso, busca a otra persona que asuma el papel de responsabilidad y si tiene pareja, esta será su elección más segura. Evidentemente al sentir su pareja que lleva toda la carga, o gran parte de ella, esto tenderá a dañar la relación.

Falta de responsabilidad financiera

Las personas con el síndrome de Peter Pan pueden evitar asumir responsabilidades financieras y postergar tareas importantes como pagar facturas, administrar presupuestos o planificar para el futuro. Esto puede llevar a retrasos en los pagos, acumulación de deudas y multas.

Gastos irresponsables

Quienes padecen del síndrome de Peter Pan, pueden tener un manejo financiero irresponsable y dificultades para alcanzar objetivos financieros importantes, como la compra de una casa, el ahorro para la jubilación, o la eliminación de deudas antes de la etapa de jubilación.

Estas personas suelen tener una tendencia a gastar impulsivamente y como ya se indicó, tienden a priorizar la diversión en lugar de cumplir sus pagos y normalmente descargan esta responsabilidad en su pareja, si la tienen.

Dificultad para mantener un empleo u oficio estable

Aquellos con el síndrome de Peter Pan pueden tener dificultades para mantener un empleo estable o avanzar en sus carreras. Esto puede deberse a una falta de compromiso y resistencia a asumir roles más responsables.

Estas personas al priorizar la búsqueda constante del entretenimiento o gratificación inmediata, no dan importancia al crecimiento profesional y a las responsabilidades. Esto, a su vez, puede afectar negativamente sus ingresos y estabilidad financiera, tanto de la persona que padece el síndrome, como el de su pareja o su familia.

Recuerde que las personas no viven de amor, y que si bien, la parte sentimental es importante en una relación de pareja, el desorden en las finanzas y la inequidad de responsabilidades, puede acabar con cualquier relación de este tipo.

Gestión del dinero e inequidad financiera en la pareja

Si hay una discrepancia en las contribuciones financieras de cada cónyuge y no se establece una comunicación y equidad adecuadas, esto puede generar resentimiento y conflictos. Si uno de los cónyuges percibe que está asumiendo una carga financiera desproporcionada, se pueden crear tensiones y descontento en la relación.

Las deudas excesivas o problemas de manejo financiero, como la falta de presupuesto, la falta de ahorro o la incapacidad de pagar facturas, pueden generar estrés y discusiones constantes. Si la pareja no puede encontrar soluciones y trabajar juntos para resolver estos problemas, su sociedad conyugal puede deteriorarse.

Si las parejas tienen objetivos financieros y estilos de vida diferentes, como uno que valora la seguridad y el ahorro, mientras que el otro disfruta de gastos extravagantes, puede haber conflictos permanentes. Las diferencias en la gestión del dinero y las prioridades pueden dificultar la toma de decisiones conjuntas y la planificación a largo plazo.

También la falta de transparencia en asuntos financieros, como ocultar deudas o mantener cuentas bancarias secretas, puede erosionar la confianza en la relación.

Reflexión

El síndrome de Peter Pan es una realidad en algunas personas. La forma en que una pareja maneja y aborda estos desafíos puede marcar la diferencia. La búsqueda de soluciones conjuntas puede ayudar a superar las dificultades y fortalecer la relación.

Si los problemas financieros persisten y no se pueden resolver de manera adecuada, es posible que algunas parejas opten por el divorcio como una forma de aliviar la tensión y buscar una mejor estabilidad económica y emocional, por eso antes de llegar a estas soluciones drásticas, es importante tener claro la forma como se relaciona su pareja con las responsabilidades y particularmente con el dinero.

No es raro oír a personas quejándose de que su “ex”, siempre fue irresponsable y sabiendo esto, aun así, tomaron la decisión de unir sus vidas a esa persona, con las consecuencias nefastas para toda la familia.

Si su pareja tiene dificultades para comprometerse en las finanzas, podría ser útil proporcionarle información y recursos sobre educación financiera. Aprender más sobre el tema podría ayudar a su pareja a comprender la importancia de asumir responsabilidad en las finanzas, pero a veces esto no es suficiente y se debe considerar la ayuda sicológica.

Si cree que esta información puede ser útil para su familia y amigos, compártala en sus redes sociales, juntos, podemos aprender mucho entre todos.

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