6 Consejos para educar a los hijos sobre el dinero

Educar hijos con hábitos financieramente saludables es una tarea crucial para prepararlos para el futuro. Enseñarles sobre la administración del dinero desde una edad temprana les proporcionará habilidades que les serán útiles durante toda su vida.

Los niños educados financieramente, no serán presa en el futuro, de quienes le ofrecen dinero fácil a cambio comprometer en algunos casos su libertad y quizás su vida, por eso esta educación es vital, no solo por lo obvio, atender sus gastos y el de sus futuras familias de forma responsable, sino porque los aleja de las tentaciones y oportunidades para obtener dinero de manera rápida y con mínimo esfuerzo. Quiero compartir con ustedes una interesante historia tomada del blog Humans of New York. Este relato explica la forma como un padre, enseña a su hijo sobre administración del dinero de una manera simple, práctica y didáctica. Esta es la explicación del niño.  

«Cada semana recibo un dólar por asignación. Luego puedo elegir la sección donde pongo mi dólar. Hay cuatro secciones: gastar, ahorrar, donar e invertir. Si pongo un dólar en la ‘sección de inversión’, mis padres me dan dos centavos adicionales al final de cada mes. ¡Solo he usado mi ‘sección de gastos’ dos veces! Tengo más de $ 10 en mi ‘sección de inversión’. Solía tener más, pero saqué algo de dinero y lo puse en mi ‘sección de donaciones’. Solíamos comprar comida para personas que no tienen mucho dinero en su ‘sección de gastos'».

El relato anterior, deja una gran enseñanza para los niños sobre los temas de responsabilidad, solidaridad con otros, y de los resultados de ahorrar e invertir. Para los padres es un gran ejemplo sobre creatividad, a la hora de transmitir conocimiento práctico en el tema de las finanzas personales. 

Los fundamentos

Fomente el ahorro: Espera versus inmediatez

Justo es en la niñez, que se deben inculcar los buenos hábitos a los niños, porque tienen una gran capacidad de aprendizaje y empatía, por lo que serán los primeros defensores del orden y del ahorro, si usted les enseña al respecto.

Los niños educados en esta materia saben que todo en vida tiene un costo y un momento para ser adquirido y que no necesariamente ese momento es el presente.

La facultad de saberse contener, de tener paciencia y no proceder de forma impulsiva y sin reflexión, se enseña a los niños por medio de la enseñanza del ahorro y de la inversión.

Regalarles a los niños una alcancía, sin mayor acompañamiento y seguimiento, no es enseñarles a ahorrar.

Casi todos los niños y adultos actuales, hemos tenido el típico cerdito con ranura para introducir algunas monedas, pero todo llegó hasta ahí, no hay seguimiento, acompañamiento, ni dirección sobre el objetivo que pretendemos con ese regalo. El relato que compartí de Humans of New York nos brinda un ejemplo del acompañamiento requerido.  

¿Para qué sirve el ahorro?

Las pequeñas metas u objetivos deben acompañar la alcancía, esto estimula el pensamiento a futuro, la responsabilidad y dará sentido al “cerdito y a su alimentación”, con esto haremos del ahorro algo natural y habitual.

Enseñar el valor del dinero también es fundamental, el hecho de que se requiere trabajo para obtenerlo y que no alcanza para todo, si no es administrado debidamente, es una lección de vida que agradecerán en el futuro.

Los niños aprenderán desde temprano que adquirir las cosas requiere de tiempo y dedicación, también que detrás de cada centavo, debe haber un esfuerzo para conseguirlo, tal y como sucede en la vida real.

El consumo responsable y la compra inteligente, viene por añadidura con estas enseñanzas, pues cuestionar cual es el mejor precio para gastar menos, es una pregunta que surgirá en algún momento al hacer uso del ahorro, claro que el adulto puede ayudar a formular esta pregunta, desde antes, enseñándole al niño a comparar precios en el supermercado o al involucrarlos en la elaboración del presupuesto familiar, después de todo ha costado reunir el dinero, esta es otra enseñanza de vida.

Si usted desea ayudar a sus hijos a desarrollar hábitos financieros saludables, aquí hay seis consejos que le pueden servir.

1 Empiece temprano

Es importante empezar a enseñar a los niños sobre el dinero desde una edad temprana. Puede empezar con actividades sencillas como darles una pequeña cantidad de dinero y enseñarles los usos que se le deben dar al dinero y ordenar esos usos en prioridades por ejemplo puede definir como una prioridad el ahorro, este se acumulará por ejemplo hasta alcanzar una meta financiera a corto o largo plazo.

Puede ser algo tan simple como ahorrar para un juguete o algo más grande. Esto les enseñará la importancia de establecer objetivos y trabajar para alcanzarlos.

2 Enseñe el valor del dinero

Es importante enseñar a los niños el valor del dinero y cómo trabajar para ganarlo. Puede hacerlo mediante la asignación de tareas en el hogar y proporcionando una pequeña cantidad de dinero a cambio.

Eso sí, no debe pagar por las responsabilidades que ya de hecho le corresponden al niño, tender la cama, estudiar, entre otras. Esto les enseñará que el dinero no viene fácilmente y que es importante trabajar para ganarlo.

3 Enseñe sobre el ahorro y la deuda:

Es importante que los niños aprendan sobre el ahorro y la deuda desde una edad temprana, le recomiendo el artículo ¡Ahorro versus deuda! Las dos caras de una moneda, para que tenga una base para conversar sobre el tema, esto les ayudará a tomar decisiones financieras informadas en el futuro.

4 Enseñe sobre presupuesto:

Enseñe a sus hijos sobre la importancia de crear un presupuesto y cómo hacerlo. Haga que participen en la elaboración del presupuesto familiar y explique cómo se deben distribuir los gastos en diferentes categorías, para esto le recomiendo el artículo: Como preparar un presupuesto efectivo. Esto les ayudará a comprender la importancia de vivir dentro de sus posibilidades y les dará habilidades valiosas para administrar su propio dinero en el futuro.

También puede involucrarlos en las decisiones financieras de la familia para que puedan aprender de forma práctica sobre el presupuesto y los diversos tipos de gastos: Primera necesidad, ocio, imprevistos y superfluos. El niño puede ayudarlo a clasificar los gastos de la casa, por ejemplo.

5 Hable sobre la inversión:

Enseñe a sus hijos sobre la inversión y cómo funciona, vea como en el relato de la primera parte de este artículo, el niño comprende que su depósito en la “sección de inversión”, hace crecer o incrementar su dinero, acá no debe complicarse, lo importante es el concepto.

Una forma simple de explicar el concepto de inversión es hacer una analogía con la siembra, si se tiene una semilla de aguacate, por ejemplo, y se planta en la tierra y si se cuida bien, eventualmente crecerá en una planta grande y saludable que producirá otros aguacates.

Con el dinero sucede lo mismo que con la semilla. Si en lugar de gastar todo el dinero en golosinas y juguetes, se «siembra» en un lugar adecuado, como una cuenta de ahorros u otros instrumentos, eventualmente «crecerá» una cantidad mayor de dinero, que se podrá utilizar cuando sea el momento, según las metas propuestas.

6 Sea consistente:

Para que los niños aprendan hábitos financieros saludables, es importante que los padres sean consistentes en su enfoque. Asegúrese de que las lecciones sobre finanzas sean regulares y que haya consecuencias si no se cumplen ciertas reglas financieras.

Por ejemplo, si el niño gastó el dinero del ahorro en algo que no era lo que se había propuesto, hay que hacerle ver que no tendrá suficiente dinero para comprar algo que realmente quería en el futuro.

Es importante que el niño vuelva a establecer sus metas financieras y a trabajar para alcanzarlas. Ayúdelo a establecer un plan de ahorro para alcanzar sus metas, y recuérdele las consecuencias de no cumplir su plan. Esto ayudará a sus hijos a comprender que la administración financiera es una parte importante de la vida diaria.

Reflexión

Es importante tener en cuenta que la educación financiera no se trata solo de enseñar conceptos teóricos, sino también de aplicarlos en la vida real y proporcionar a los niños la oportunidad de practicar lo que aprenden.

Recuerde que los niños aprenden con el ejemplo. Sea un modelo a seguir al administrar su propio dinero de manera responsable y hable abiertamente sobre sus decisiones financieras con sus hijos. Si tiene que educarse usted primero, ¡Hágalo!.

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